Tudela

Alfombras: Oriente en tus pies

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Las alfombras forman una parte importante de la decoración de una casa. Aportan calidez y color al hogar y, además de para adornar, sirven para destacar áreas diferentes en las habitaciones. Como señala Moussa Bahraoui, gerente del comercio especializado Ámbar, de Tudela, “las alfombras ya no se compran para dar calor, porque actualmente las casas disponen de buena calefacción. El cometido actual de la alfombra es el de decorar”.

Origen en las esteras

En cuanto al tamaño de las alfombras, “hoy se llevan más pequeñas y de más calidad. Su tamaño debe permitir que se vea el suelo, y no colocarlas de tal forma que lleguen al sofá o hasta el borde del mueble. Hace unos años el estilo era este, pero hoy es todo lo contrario”, indica Moussa Bahraoui. Según este experto, se llevan más las alfombras modernas, “la mayoría realizadas con lana”, que las clásicas. Y dentro de estas últimas, las persas “han perdido bastante fuerza porque están realizadas con colores muy fuertes, como el granate, que ya no se llevan. Ahora se venden más las alfombras en colores suaves y pastel, ya que combinan con todo”, asegura.

La alfombra tiene su origen probablemente en las primeras esteras que usaron las personas para cubrir el suelo en las viviendas a partir del Neolítico. Aunque han existido fábricas en Europa y confecciones hechas por los indios americanos, tanto su origen como los ejemplares más afamados se localizan en Asia, desde Turquía hasta China, por lo que la alfombra es una de las artes que está más relacionada con el Oriente.

Existen dos tipos de alfombras: las de tapicería, lisas o tejidas, y las de nudo. Las primeras, como los kilim, destán formadas simplemente por unos hilos verticales (urdimbre) y unos horizontales (trama). El dibujo se crea tejiendo las hebras horizontales de colores de acuerdo con el diseño. Esta técnica se adapta más al tipo de dibujo geométrico que curvilíneo. Los nudos constituyen el elemento característico de la alfombra anudada. Se denominan así porque realmente se anuda una hebra del material cogiendo algunos hilos de la urdimbre; después se corta hacia el exterior y se obtiene una superficie continua de mechones de pelo agradable al tacto. Los tipos básicos de nudos son: el persa, el turco y el español. Los materiales empleados en la fabricación de las alfombras han cambiado poco a lo largo de los siglos. El hilo continúa siendo de lana o seda, aunque también se emplea algodón.