La firma navarra Aceites Sandúa ha decidido abandonar las grandes superficies y afianzar su implantación en el canal de distribución minorista, compuesto por las tradicionales tiendas de barrio.
La empresa, que elabora, envasa y distribuye aceites desde hace 35 años, toma esta determinación motivada por las múltiples desventajas que para el pequeño fabricante supone vender sus productos en las grandes cadenas de distribución.
“Tras dos años de venta en estas cadenas, vemos innumerables desventajas para nuestros productos: la impersonalidad en el trato comercial, el fuerte apoyo a las marcas propias en detrimento de las del fabricante, además de las exigencias y presiones que supone estar allí en materia de precios y promociones, lo que puede conllevar una merma de calidad para alcanzar esos costes”, explica Laura Sandúa, directora de Aceites Sandúa.
De este modo, Aceites Sandúa ha retirado todos sus productos de las grandes superficies y centrará sus fuerzas en la comercialización de los mismos en el canal tradicional, como carnicerías, fruterías y, en general, en las tiendas de barrio.
“La relación que se establece entre fabricante y tienda minorista es mucho más personal, ya que estos comercios se identifican con la marca que venden y con la empresa con la que trabajan”, asegura Laura Sandúa.
Cambio de imagen
De todos los productos que se van a comercializar, la empresa pondrá especial énfasis en los aceites de oliva virgen extra y los dos nuevos monovarietales lanzados recientemente al mercado bajo la marca Capricho Navarro, uno de Arbequina y otro de Empeltre. A estos se añaden la selección de aceites virgen extra de la marca Sandúa, los de oliva, orujo de oliva, girasol, semillas, aceites especiales para freir, etc.
Aceites Sandúa se encuentra firmemente implantada en la mitad norte de España, aunque su zona de influencia va ampliándose cada vez más y sus canales de distribución preferente, además de los de gran consumo, son los de Horeca (hosteleria, restauración, catering), industria conservera y de alta gama como fabricantes de patatas, tomates, tortillas, pizzas, etc.
Esta apuesta por una nueva forma de distribución coincide con un cambio de imagen, ahora más clara e informativa, que se ha aplicado en todas las líneas de actividad externa de la empresa.
Las etiquetas de los productos, la papelería, rotulación, vehículos, etc., incorporan ya esta nueva imagen, en la que no desaparecen las olivas emblemáticas del aceite, pero éstas se incorporan ahora como fondo.
El nuevo logo también figura en toda la ropa deportiva de los clubs que la empresa patrocina, como el Itxako de balonmano, Remonte y clubs de fútbol. En éstos sí que desaparecen las olivas, para centrarse en el nombre Sandúa, de forma más directa y limpia.
