Desde que Dolores Baigorri abandonara las labores de ayuda que, desde hace casi veinte años, llevaba realizando en la parroquia de Ablitas al verse obligada a elegir entre éstas y sus funciones como edil de la villa, han sido muchas y constantes las muestras de apoyo recibidas por parte de sus vecinos.
Y éstas se vieron refrendadas el pasado sábado cuando, cerca de seiscientas personas se echaron a la calle, para participar en una concentración convocada por el Coro Juvenil a través de la que pidieron a la Diócesis de Navarra que "recapacite y corrija el fallo cometido”. De forma silenciosa y encabezada por la propia Dolores Baigorri, la concentración -convocada también en apoyo de Santos Senosiáin, antiguo párroco de la villa- concluyó en la plaza de los Fueros, donde uno de los componentes del coro leyó un comunicado de apoyo. “Estamos aquí personas con nombres y apellidos, gente que damos la cara ante esta injusticia que, según creemos, se ha cometido hacia Dolores y el padre Santos”, comenzaba el manifiesto. En él también se afirmó que “siempre te has mantenida íntegra a tus ideas, como candidata independiente, para tan sólo ofrecer tu servicio a este pueblo”. Visiblemente emocionada, Baigorri escuchó el manifiesto y recibió numerosas muestras de cariño tras la marcha.
El obispo Francisco Pérez fue el que planteó la disyuntiva a la concejal independiente tras tener conocimiento, según parece a través de unas cartas anónimas, de que Baigorri había oficiado la boda civil de un familiar.
