Los usuarios de la piscina municipal cubierta de Tudela ya pueden disfrutar de la nueva zona de hidromasaje. Un vaso que entró en funcionamiento el pasado sábado y que, dos años y nueve meses después de la inauguración de las instalaciones, pone a disposición de los ciudadanos un servicio del que hasta ahora no se había podido hacer uso. Como se recordará, la piscina ya contaba con varias cascadas de hidromasaje pero nunca llegaron a entrar en funcionamiento ya que Salud no permitió su uso por no cumplir con la normativa actual en la prevención de legionela.
No ha sido hasta las obras de reforma que se han ejecutado en la instalación, y que dieron comienzo el pasado 27 de julio, cuando los tudelanos han podido hacer uso de la zona de hidroterapia.
Con un coste de 300.000 euros, la reforma ha dividido el vaso de recreo en dos zonas: la de recreo propiamente dicha, de 16x14 metros de superficie, y la de hidroterapia. Así, el nuevo vaso cuenta con unas dimensiones de 10x13 metros y una lámina de agua de 115 m2. Con una profundidad máxima de 1,20 metros y una mínima de un metro, dispone de siete cascadas (son las que ya existían en la instalación), tres toberas de hidromasaje laterales, otras dos en el suelo, cuatro tumbonas de aire y dos placas de aire indicadas para pies y piernas. Además, se han habilitado dos escaleras para facilitar el acceso al vaso.
Jesús Álava, edil de Deportes, afirmó que esta nueva zona “va a ser un atractivo más y estamos seguros de que va a tener un incremento de socios”. Actualmente, el número de abonados es de 1.800. Del mismo modo, tras destacar que “el vaso está adaptado a toda la normativa que se requiere con el tema de la legionela”, el edil resaltó el ahorro energético que rodea a la nueva dotación. ”El 80% de lo que nos cuesta calentar este agua viene trasmitido desde las placas solares y del calor sobrante de los otros vasos”.
