Del conjunto de parques del Consorcio de Bomberos de Navarra, el de Tudela es el que, en proporción, ha contado con más voluntarios para acudir en misión de ayuda a Galicia, azotada este mes por una oleada de incendios que practicamente se da por controlada. A estas horas, el sargento de Tudela, Patxi Baldanta, de 44 años de edad, que ha comandado el segundo contingente enviado a Santiago por el Gobierno de Navarra el pasado día 13, está a punto de poner fin a esta misión de colaboración y ayuda voluntaria que ha experimentado junto al murchantino Aitor Simón, de 31 años, y los tudelanos Eduardo Escalada y Alberto Ramos, de 28 y 32 años, respectivamente. Los cuatro profesionales riberos, que partieron de Tudela sin fecha concreta de regreso, trabajaron el miércoles su última jornada activa en Galicia, en la localidad costera de Noia, pero la nueva situación meteorológica que atraviesa Galicia, donde se ha empezado a registrar lluvias, han facilitado el control y extinción total del fuego, cuyo pico más alto se alcanzó hace unos días, con alrededor de 150 focos.
Experiencia enriquecedora
De ello han dado fe los 3 bomberos de Tudela que formaron parte del primer grupo de 14 bomberos desplazado a la Comunidad Gallega. Son el tudelano Teodoro Vertedor, el pamplonés David Ruiz y el ejeano Pablo Bericat.
Tras permanecer una semana codo con codo con unas llamas que, según Teodoro Vertedor, “parecían tener inteligencia”, tanto este tudelano como sus compañeros han descrito la experiencia como totalmente enriquecedora. “Ha sido todo aprender. Somos bomberos y este trabajo es así de contradictorio. Lo que para nosotros supone trabajo, aprendizaje y gusto, es malo para el resto del mundo”, explicó Vertedor. Por su parte, David Ruiz añadió otro dato que no deja de resultar curioso. “Al final los propios vecinos de los pueblos provocaban el fuego porque era mejor acabar con todo y evitar más riesgos”, dijo el joven David Ruiz.
