Cardelina Tudelana: Estos fines de semana se ha producido otro agravio más, si cabe, sobre el colectivo de los cazadores de Tudela.
Se han cazado los sotos de Remonta y Tetones, los cuales pertenecen a la confederación y fueron declarados Enclaves Naturales por el Gobierno de Navarra. Hasta aquí, podría decirse que todo ‘normal’, que tampoco debería ser así. Los aprovechamientos y gestión en derechos cinegéticos son muy dispares en Navarra y dependiendo de la zona y/o de sus gestores se consiguen unas cosas u otras. ¿Cómo es posible que hayan dado permiso, a una persona que tiene daños colindantes, para cazar en los tetones? ¿Cómo es posible que el ayuntamiento no haya gestionado esta cacería?
Los integrantes de la misma tendrían que haber salido de un sorteo de entre los apuntados a tal efecto, no de una elección particular del responsable de dicha cacería.
¿Para qué nos han hecho apuntarnos en una lista para cazar por daños? El Muy Ilustre es el titular de dichos terrenos y tuvo que solicitar dicha cacería: ¿cómo es posible que haya ocurrido esto?
Con la Remonta sucede lo mismo. Si el titular o propietario de los terrenos adyacentes ha hecho sacación de los terrenos del coto y luego se aprovecha para gestionar los derechos cinegéticos. Me consta que otra asociación local de caza había pedido desde marzo la gestión de los sotos y balsas para minimizar los daños y ni siquiera ha sido contestada.
El coto de Tudela debe de ser gestionado por y para cazadores por un equipo de gente experimentada que garantize el uso y servicio de los aprovechamientos dentro del marco legal establecido.
