Tudela acaba de abrir sus piscinas cubiertas, una dotación para el ocio, el deporte y la salud que tenía que haber estado en marcha hace dos años. Los tudelanos, y algunos riberos, acudieron en las jornada de puertas abiertas a ver las instalaciones, de la que se han llevado una buena impresión. Como las comparaciones son inevitables, Cascante y su centro termolúdico fueron referente para algunos a la hora de cotejar contraprestaciones, pero se trata de dos centros diferentes en esencia. Las piscinas cubiertas, después de un rosario de dificultades, por fin están en marcha; eso es lo importante, como no lo es menos que la Ciudad Deportiva se vaya completando con las piscinas de verano y demás dotaciones, y que desde la Concejalía de Deportes y desde la empresa adjudicataria le echen imaginación para sacar el máximo rendimiento al complejo deportivo. Los escolares, desde los propios colegios, podrían ser unos usuarios perfectos. Por cierto, no hay autobuses por la tarde ni los fines de semana, que te acerquen hasta la instalación. Un fallo imperdonable.
