Opinión

Las cacas regresan a Ribotas

Vuelve el verano y lo que nos temíamos, las cacas a Ribotas. Parece ser que no se trata de una gamberrada, son ya varios los años en los que los bañistas de esta instalación tienen que sufrir esta desagradable sorpresa: tanto los que se encuentran en el agua y se topan con las deposiciones, como los que están tomando el sol, tienen calor y cuando van a darse un chapuzón se encuentran con que no podrán hacer uso del vaso grande hasta una hora e incluso dos horas más tarde (vamos, mejor irse a casa). Desde la concejalía de Deportes debe solucionarse este problema que -no nos engañemos- ya no es puntual, y se debe hacer con celeridad. No vale argumentar que cuando esto sucede se aplica el correcto protocolo sanitario, y ¡todos a bañarse! También esperamos que si el autor de las deposiciones es alguien que tiene problemas físicos, no se solucione dejando que se pueda bañar con un pañal (que es lo que se hace, por cierto, con los niños en el vaso pequeño). ¿Acaso esto sería más higiénico?