El sector primario está demandando a Europa una Política Agrícola Común, PAC, más justa, eliminando criterios actuales sobre las ayudas como el pago por hectárea o los derechos históricos y que estos se centren en la realidad del productor. La petición se centra en que es necesario que la PAC sea “más eficaz y equitativa en el trato al productor”, como reclamó la semana pasada Joaquín Olona, consejero aragonés del ramo, a la ministra en funciones, García Tejerina.
La PAC necesita una reforma profunda. Hay que prescindir de conceptos actuales como el carácter histórico de los derechos sobre los que se regulan las subvenciones, la concesión de pagos por hectárea y la regionalización. Las ayudas se deben “focalizar” según la “condición personal” del productor, ya que es “equivocado” que al negociar la PAC se vea desde un punto de vista “territorial”, porque “nos encontramos que le falta equidad y eficacia para los agricultores”, observó Olona, que también indicó que el primer pilar de la PAC, compensar rentas con ayudas directas en lo que se debe “actuar cuanto antes”, sin esperar al 2020, año hasta el que está vigente la actual PAC, que sólo lleva un año en marcha.
