Sin duda, nuestra Comarca es un territorio sorprendente: Soporta estoicamente una crisis galopante y, entre tanto, la sociedad se va de vacaciones sin preocuparse por nada. Ni se entiende tanta inacción, ni se comprende que ni gobiernos locales ni oposiciones de todos los colores del arco iris reaccionen de algún modo planteando iniciativas de corte agresivo, contundente y radical: ¿Hasta cuándo podremos seguir así? No se entiende, francamente.
Lo lógico, lo esperable, sería que la ciudadanía cortara la AP-15 para reclamar vías seguras sin coste adicional; que paralizara las calles, la vida cultural, social y laboral, reclamando un Plan, algún Proyecto, algo de perspectiva... ¡Pero nada! El erial de nuestros montes se traslada a la vida colectiva y, lo que es peor, a todos nosotros. ¿Hasta cuándo? ¡Sólo depende de nosotros mismos! Nadie vendrá a hacerlo de fuera de la Ribera... ¿Llegará?
