Desde luego, el mundo está del revés. El día 8 de diciembre el BOE recogió el nuevo convenio que ha firmado la Liga de Fútbol Profesional, LFP, y la Asociación de Futbolistas Españoles, AFE, mediante el que se fija el salario mínimo de estos ‘deportistas’.
Así, un jugador de Segunda tendrá un salario mínimo de 77.500€, nada menos, y más que los 70.048€ que cobrará la Presidenta del Gobierno de Navarra, Uxue Barkos, tal y como se contempla en los Presupuestos Generales de Navarra previstos para el ejercicio 2016.
La verdad es que el dato sorprende sobremanera y explica, en parte, la situación de la política española, en la que se saca pecho por cómo se bajan los sueldos de alcaldes, presidentes, consejeros, etc., en lugar de poner en valor el esfuerzo, capacidad y entrega que se presupone a estos cargos. Para muchos, -demasiados-, cualquier sueldo es demasiado, pero pretender que la cosa pública funcione con los mejores, cuando sus salarios son inferiores a los de un simple ‘furbolista’ es, cuando menos, demoniaco.
