Lectoras y lectores: Felices Fiestas y deseos de éxito para el 2019. Que vuestro día a día, el de vuestra familia y amistades, vaya siempre a mejor; en la voluntad, está el camino hacia el éxito.
Cerramos un año en Navarra en el que la Ribera no ha estado presente en la agenda del Gobierno. Un año en el que se ha perdido la oportunidad de afrontar uno de los grandes retos que tenemos como comunidad que es el desequilibrio territorial, para que ninguna zona de Navarra se quede atrás.
Este año se han reducido las tasas de desempleo, pero la precariedad y la siniestralidad laboral han sido protagonistas. La temporalidad, la parcialidad y los bajos salarios se han cebado sobre todo con las personas más jóvenes.
Han sido, este año también, numerosas, las manifestaciones por los déficits en la atención sanitaria en nuestra zona, sobre todo la atención pediátrica.
Por eso mi voluntad para el 2019, que ha de ser un año intenso y decisivo en lo político, es impulsar un nuevo Gobierno que sí crea en la Ribera, en su gente, en su potencial, que tenga claro que la equidad en el acceso a los servicios públicos es un derecho y que el empleo y la calidad del mismo sea su principal preocupación.
