Opinión

Porqué no firmé el pacto

La semana pasada se publicó en diferentes medios de comunicación la firma del Pacto del Casco Antiguo, el cual fue firmado por todos los grupos políticos a excepción del concejal no adscrito. Pues bien, el sábado pasado estando dando una vuelta por el casco antiguo, se me acerco una persona y me dijo, porque no has querido firmar? a lo que yo le dije “estas equivocado, yo no solo apoyo al casco antiguo sino a todos los barrios de Tudela”, una vez dicho esto paso a comentar los motivos por los que no firme el pacto.

En primer lugar quiero decir que de los 12 puntos de los que se compone el pacto, estoy de acuerdo con 10 y discrepo en 2 puntos, pero como no se podía firmar por puntos ya que me dijeron “o firmas todo, o no firmes nada”, entonces por convicción con mis ideas no lo firme.

El punto no 6 dice textualmente “Actualizar la regulación de la concentración de bares, peñas o cuartos en zonas acústicamente saturadas”, con esto no estoy de acuerdo puesto que yo como comerciante no puedo impedir que un ciudadano abra un local de hostelería y restauración porque haya en la zona varios locales más, cuando la apertura de ese negocio va a traer al casco viejo más dinamismo, prosperidad y la creación de algún puesto de trabajo. Además de que para la apertura del local tendrá que pasar todas las revisiones e inspecciones pertinentes para que le puedan conceder la apertura.

El punto no 12 dice “En cada presupuesto anual se deberán recoger partidas para inversiones en el barrio equivalentes de, al menos, 500.000 euros”, mi postura es que haya inversiones pero de acuerdo con las necesidades, no una cantidad fija, es decir que se gaste el dinero necesario de acuerdo a los proyectos que se deban realizar en cada momento, esto implica que unos años el gasto puede ser mayor y otros años menor. Vamos a imaginarnos que si ponemos esta cantidad fija, vengan a solicitarnos lo mismo otras asociaciones de vecinos de los diferentes barrios de la ciudad (azucarera, griseras, virgen de la cabeza, barrio de Lourdes, etc.), como vamos a decirles, que a ellos no, entonces íbamos a hipotecar el presupuesto de la ciudad concediéndoles a todos ellos la misma cantidad de dinero. Por eso considero que, como he dicho antes, hay que invertir en todos y cada uno de los barrios según las necesidades que haya en cada momento.

Entonces por coherencia y convicción con mis ideas, es por lo que no he firmado el pacto.