Opinión

Volveremos

“Ser de los que ganan es muy fácil, ser de Osasuna me parece mejor”. Cuántas y cuántas veces se ha escuchado este cántico en el templo rojillo y que define a la perfección lo que es este club. No somos de Osasuna para celebrar títulos, somos rojillos para arengar a los nuestros hasta el último minuto de cada partido. Somos de los de aquí, de los que han crecido tres portales más allá de nuestra casa, de los que padecimos como rivales en alevín, de los Cruchaga, Josetxo o Puñal, somos rojillos desde que nacimos y así nos vamos a morir.

Ayer se consumó lo que todos sabíamos, la crónica de una muerte anunciada y al más puro estilo de lo que ha sido esta temporada: errores de bulto, falta de garra y un equipo sin rumbo. Urge un nuevo proyecto ilusionante. El milagro del año pasado se ha agrandado con el tiempo al ver el ridículo que hemos pasado esta temporada donde ni el club, ni sus jugadores han estado a la altura; no así su afición, que a pesar de ser últimos, hace menos de un mes celebraba la primera victoria en El Sadar como si de un título se tratara. Allí vi a aficionados de Osasuna más motivados y felices que muchos madridistas o culés celebrando alguno de sus numerosos títulos.

Volvemos a Segunda. Volvemos a los torreznos de Soria, a la camaradería de Huesca, a la ronda por Valladolid y a disfrutar de unos viajes que en Primera nos han minado con horarios y precios prohibitivos. Volvemos a segunda y no tendremos que escuchar las constantes y ridículas quejas de los equipos “grandes” sobre errores arbitrales, ni tendremos que aguantar el desprecio de las altas élites del “periodismo” que tan bien azotan al club rojillo, pero no tienen agallas para hacerlo con los equipos ricos.

Volvemos a descender y hoy es un día triste para la familia rojilla. ¡Cómo echaremos de menos la visita al hermano vitoriano o la 'vueltica por Donosti! Hoy seremos el blanco perfecto de aficionados de postal de otros equipos, pero que aprovechen mientras puedan.

Volvemos a Segunda, con la misma ilusión de siempre, con las ganas de volver a reencontrarnos en El Sadar con todos esos compañeros (ya amigos) de butaca con los que tantos goles hemos celebrado y tantas frustraciones nos hemos llevado. Descendemos, sí; nos volvemos a caer, pero nos levantaremos. Antes o después volveremos. Osasuna siempre vuelve.

¡Aúpa Osasuna!

Iker Sesma López

Presidente de La Rana Rojilla