Opinión

El Ebro, ya es un cenagal

El profesor de Biología Ambiental y experto en especies dulceacuícolas Rafael Miranda ha afirmado que el problema de las especies invasoras “es de tal envergadura” que éstas “superan en la actualidad a las autóctonas en ríos, lagos y pantanos del eje del Ebro”.

El profesor de Biología Ambiental y experto en especies dulceacuícolas Rafael Miranda ha afirmado que el problema de las especies invasoras “es de tal envergadura” que éstas “superan en la actualidad a las autóctonas en ríos, lagos y pantanos del eje del Ebro”. ¡Todo un problema!

Miranda fue el organizador de un encuentro en septiembre en la Universidad de Navarra con sesenta expertos nacionales e internacionales para debatir durante dos días sobre la calidad ecológica del agua, y sus conclusiones no pudieron ser más pesimistas. Por desgracia, el río Ebro ya se ha convertido en un cenagal muerto y alienado lleno de flora y fauna ajena a su ser.

Las especies más abundantes y peligrosas con que cuenta ahora el río son el black bass (o perca americana), el lucio y el siluro, todas ellas especies exóticas depredadoras y agresivas, razón por la que, tristemente, debemos dar el curso del río por muerto medioambientalmente.