La Fiscalia de la Comunidad Foral de Navarra ha presentado una denuncia ante el Juzgado de Instrucción Decano de Tudela por la presunta comisión de un Delito contra los Recursos Naturales y el Medio Ambiente, por los reiterados vertidos de aguas residuales al río Alhama a su paso por Corella, sin realizar el preceptivo tratamiento.
La presentación de la denuncia por parte de la Fiscalía viene motivada por las denuncias presentadas por Gurelur durante el verano del año pasado, ante la Fiscalía y ante la Confederación Hidrográfica del Ebro, con vistas a conseguir paralizar los contaminantes vertidos y que los responsables de este delito ambiental pongan en marcha todas las actuaciones encaminadas a recuperar los valores ambientales que existían en la zona afectada antes de los ilegales vertidos.
Gurelur detectó a lo largo del pasado verano diferentes vertidos procedentes de la red de saneamiento de la estación de depuradora de aguas residuales de Corella sin realizar el tratamiento obligatorio, así como vertidos directos al río desde la red de saneamiento de esta localidad, sin el previo paso por la depuradora. Estos vertidos han provocado el deterioro de la calidad de las aguas y de la ribera del río Alhama en un tramo de unos dos kilómetros, afectando también a una acequia de riego
Urge, por tanto, la restauración ambiental de la zona extrayendo del lugar los contaminantes para su posterior tratamiento en planta autorizada. Así mismo, se ve necesario el desmantelamiento y clausura de las salidas directas de la red de saneamiento al río Alhama, y cualquier otra salida directa al río que pudiera existir del colector principal u otros secundarios que transporten las aguas sucias hasta la depuradora.
Estos vertidos se han producido durante el delicado período de reproducción del visón europeo por lo que se han podido causar importantes afecciones al mismo, dado que hay constancia de su presencia en este río. Este mamífero está atravesando a nivel global un alto riesgo de extinción, lo que ha motivado que el Ministerio de Medio Ambiente lo haya declarado como “En situación crítica”.
Gurelur confia que los vertidos que han motivado la presentación de las denuncias sean los últimos que sufre este castigado río, requiendo, además, que las administraciones encargadas de su conservación cumplan con sus obligaciones persiguiendo y castigando a los responsables de los mismos.
