Han pasado ya poco más de 15 años desde que un jovencísimo Javier Arellano entrara por primera vez en el consistorio corellano con su acta de concejal de la mano de Ramón Jiménez, quien por aquel entonces acababa de ser recién elegido alcalde de Corella. Ha estado en cuatro legislaturas y ha conocido a tres alcaldes, todos ellos de diferentes ideologías y partidos, y en la actualidad es el concejal que más años lleva en el Ayuntamiento. Javier Arellano, 'El Chiva' como lo llaman algunos, decide dejar la política en activo y como colofón final a 16 años de servicio a Corella tendrá el honor de lanzar el cohete del próximo 23 de septiembre, igual que ya hiciera hace 12 años.
¿Cómo te enteraste de que ibas a lanzar el cohete?
Se había hablado un poco y mucha sorpresa tampoco fue porque somos tres y una ya lo había tirado, así que...
¿Cuál fue tu reacción?
No es una cosa nueva para mí porque en 2006 también lo lancé. La sensación que me queda es que es el broche final a mi paso por el Ayuntamiento. Van a ser 16 años y al final uno de los momentos más bonitos como concejal puede ser lanzar este cohete.
Te ha tocado ver muchos cambios en el Ayuntamiento durante estos años.
Cada grupo de gobierno ha tenido su sello. A mí me tocó el momento en el que por primera vez podía gobernar la izquierda y en aquella época estuve en Deporte y Juventud. Fueron años complicados y esta legislatura ya llevaba el bagaje de las 3 anteriores.
Estoy llevando Festejos y puede parecer que es una vez al año pero al final estás todo el año preparando unas fiestas.
¿Has disfrutado de esta concejalía?
Sí, tanto la primera como esta han sido concejalías en las que disfrutas. En deporte al final era día a día, sin embargo en festejos puede parecer que es una semana, pero la preparas a lo largo del año. Yo digo que esa semana no la disfruto porque como tienes tantas cosas y tantas responsabilidades... estar pendiente de que la orquesta ha llegado, de que las vacas están en su sitio, de esto y lo otro; lo cierto es que no las disfrutas como te gustaría disfrutarlas. Casi las disfruto más preparándolas, que no esta semana; así que cuando llega el día 30 ya respiras.
Ahora que te vas a retirar de la política, echando la vista atrás, ¿a quiénes recuerdas?
A nivel personal a mi mujer y a mi familia, que son los que han tenido que soportar todo este camino. Tanto las cosas buenas como puede ser el próximo 23 o el 23 de septiembre del 2006, pero también las cosas malas. Esto es un pueblo y a unos les gustan unas cosas, a otros otras... así que lo hagas bien o mal siempre va a haber críticas; así que sobre todo va para ellos.
Javier Arellano, elecciones 2003
A nivel político a Ramón Jiménez que fue quien apostó por mí y estuvimos 12 años juntos. En esta legislatura en todo lo que le he pedido consejo me ha ayudado. También se lo dedico a todos mis compañeros que han pasado por el grupo político del PSN, aunque yo no sea del PSN porque soy independiente y yo también he votado en contra del PSN.
Tu mujer no se va a creer que te retiras definitivamente.
Dice que no, que no se lo cree; pero sí que está decidido ya. En las anteriores ya no tenía pensado ir y al final por responsabilidad continué.
¿Siendo joven, decimos adiós para siempre a la política o está abierta la vuelta en el futuro?
Nunca puedes decir no a nada, pero lo veo muy lejano. No me considero viejo, empecé con 23 años, tengo 39 y esto se tiene que regenerar. Tiene que venir nueva gente con nuevas ideas y todo por el bien de Corella, que es por lo que estamos.
Yo no me considero político. Los políticos son los que se ganan la vida con la política y yo vengo aquí, para intentar hacerlo lo mejor posible, pero no para vivir de ello. Para unos lo haré mejor y para otros peor, pero siempre por el bien de Corella. He sido independiente y alguna vez he votado en contra de mi propio partido porque lo que se iba a proponer o no pertenecía al ámbito de Corella o no tenía Corella nada que decir ahí y se trataba de posicionarse políticamente para una cosa.
Lo cierto es que me ha gustado trabajar por Corella, pero toca dar un paso a un lado y no sé lo que pasará en el futuro, pero no creo que vuelva.
