Opinión

El progreso es otra cosa

Resulta gracioso que la izquierda se auto erija “progresista”, cuando es evidente que desconoce por completo lo que es el progreso. Este sábado que se constituyeron los Ayuntamientos, resultó lamentable ver cómo, en Pamplona y Barcelona, por citar sólo dos ejemplos, las plazas de los consistorios se llenaron de gente ‘progre’ y alternativa de todo, protestando porque no les gustaba quién había salido elegido alcalde. ¡Menudos demócratas! Sólo los suyos son los buenos, los modernos, al parecer. ¡Qué ganado!

Y lo mismo ocurre en otros escenarios, como es el caso de Ciudadanos, que se ha echado en las manos de VOX, desprendiéndose de Manuel Valls Galfetti, en lugar de tender la mano a un PSOE necesitado de un sentido común que ha desaparecido por completo de la escena política. Mientras el PP niega lo que exigía a los socialistas en el Congreso.

Así, mal nos va a ir. Somos incapaces de reconocer en el otro la dignidad y derecho que reclamamos para nosotros mismos. Mientras se dan codazos por ver quién es más progre sólo para aparentar.