Mantener el cuerpo sano: la importancia del colágeno y sus beneficios para nuestra salud

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¿Te has preguntado para qué sirve el colágeno? Estamos siempre en la búsqueda de una vida sana, donde el deporte y la alimentación juegan un papel fundamental. Ambos, en correcta armonía, brindan al organismo la energía necesaria para funcionar bien, y rendir más. Pero hay que estar atentos y alertas, ya que podemos, sin darnos cuenta, generar lesiones especialmente en las articulaciones y el aparato locomotor.

El colágeno es una proteína, que está presente en todos los tejidos del cuerpo que sirven como armazón, el sostén de nuestra estructura: huesos, tendones, músculos, cartílagos y articulaciones. El colágeno tiene como función principal dar elasticidad, hidratar y nutrir. Pero además, cumple otras funciones de importancia vital para nuestro organismo, y las resumimos a continuación:

  • Evita la degeneración de los cartílagos y por ende, el dolor articular
  • Mantiene huesos en estado óptimo
  • Disminuye el riesgo de rotura ósea
  • Retiene sales de calcio en su matriz contribuyendo al mantenimiento de la densidad ósea
  • Contribuye a la reconstrucción del hueso
  • Reduce la degradación de la masa
  • Disminuye el riesgo de rotura ósea
  • Devuelve la lubricación perdida entre ligamentos y articulaciones
  • Ayuda a la integridad de los discos intervertebrales y los meniscos
  • Aumenta el rendimiento cardíaco
  • Es revitalizante
  • Fomenta la producción de energía
  • Es precursor de aminoácidos esenciales
  • Puede funcionar como colaborador en las dietas de adelgazamiento por su efecto saciante.

Sabemos que con el paso del tiempo y al avanzar el proceso de envejecimiento, se ralentiza la producción natural de determinadas sustancias así como algunos procesos del cuerpo destinados especialmente a contribuir con su metabolización o asimilación. De hecho el colágeno comienza a descender a partir de los 25 ó 30 años, y desde los 40 años en adelante resulta fundamental suplir su carencia.

Existen varias formas de aportar colágeno a nuestro organismo, y una de ellas es, naturalmente con la alimentación. Podemos ingerir alimentos que sean ricos en colágeno, como la carne, el pescado, los huevos y los lácteos, o podemos optar por incorporar o aumentar la ingesta de  aquellos alimentos que estimulan su producción.

Por ejemplo, aquellos que contienen Vitamina C, como los kiwis, naranjas, pomelos, piñas, melón, aguacate y mango. También las hortalizas, en especial las coles, los tomates, los pimientos, la espinaca y las berenjena. Otros productos recomendados son los las frutas ricas en antocianina como la cereza, los arándanos y las moras, así como el aceites de semilla de girasol y cualquier alimento rico en ácidos grasos poliinsaturados como el pescado azul y los crustáceos. No nos olvidemos también de las leche de soja y, las nueces.

Pero resulta que la ingesta de este este tipo de alimentos no es suficiente. El colágeno aportado por los alimentos se encuentra en una forma poco asimilable por el organismo, y para que esto ocurra, el colágeno debe pasar por un proceso para que sea correctamente absorbido por el intestino. Los suplementos ricos en colágeno son una opción interesante que completa la alimentación y nos asegura la ingesta diaria necesaria.

A la hora de comprar colágeno debemos prestar atención a las distintas opciones con las que contamos, ya que podemos comprarlo sólo o combinado con otros compuestos que refuerzan su acción, como es el caso del colágeno combinado con ácido hialurónico, donde el poder hidratante de este último ayuda a nutrir y a cuidar piel; o el colágeno con magnesio, destinado a eliminar la fatiga y disminuir el cansancio, ideal para los deportistas y para mejorar el estado anímico y de energía y vitalidad general.

Pero hay más: una opción interesante es el colágeno unido al ácido hialurónico y a la vitamina C, que contribuye en modo directo a la formación de colágeno, facilitando el funcionamiento normal de los cartílagos, los huesos y la piel.

Todos los suplementos preparados que son ricos en colágeno proceden del reino animal, ya sea marino o terrestre, nunca procede de los vegetales. El colágeno marino procede de las espinas y de la piel de pescado y de los crustáceos y moluscos. El colágeno terrestre procede del tejido articular y óseo del ganado porcino o bovino. ¿Cuál es el mejor?  La mayoría de estudios demuestran que no es en verdad importante el origen, sino que el suplemento haya sido sometido a rigurosos controles de calidad, que aseguren la ausencia de metales pesados y otros contaminantes.

¿Cuál es la cantidad de ingesta aconsejada? Para que sea verdaderamente efectivo, es ideal tomar entre 10 y 12 gramos al día. Se puede disolver en leche animal o vegetal, leche sola o con cacao o café; también se puede utilizar en batidos, yogur, zumos e  infusiones. Hay que tener paciencia pues sus efectos no empiezan a notarse antes de las 5 ó 6 semanas de ingesta continuada.