“Dos mujeres visionarias”

Este evento pretende ser un punto de encuentro y reflexión sobre el papel de los empresarios, ante la sociedad. Tenemos que asumir y reivindicar nuestro rol de motor de la sociedad, generador de riqueza y de bienestar.

No estoy hablando de superhéroes, sólo de personas que son capaces de asumir un modelo de vida, en el que el riesgo económico siempre está presente y asumido...

En esta contribución al reconocimiento de las empresas y de sus cuadros directivos, se enmarcan los premios AER, que alcanzan su décimo séptima edición y que recaen en dos mujeres empresarias, dos emprendedoras y visionarias que han sabido escuchar, observar, aprender, adaptarse y decidir en la empresa,
el entorno y la economía en la que se mueven...

La realidad palpable, el día a día de nuestras empresas, demuestra que se está trabajando más, que se vende más, que se abren nuevos mercados, pero también que la rentabilidad no crece en la misma proporción... 

Ante el Anteproyecto de Ley Foral de Contratación Pública AER demandó máxima homogeneidad y coherencia con la Ley Estatal de Contratos Públicos. En esta realidad no caben los particularismos, no caben las identidades inventadas desde la literatura del romanticismo y la política... evitando políticas lingüísticas que sitúen en desventaja a las empresas de unas zonas respecto a otras. 

En esta coyuntura, el apoyo del sector público es importante, pero no es el más importante. En la Ribera tenemos ejemplos de la bueno y lo malo que pueda ser una administración pública como compañera de viaje... Ayuntamientos riberos como Marcilla, Funes o Fustiñana, que están demostrando cercanía, estabilidad, apoyo, sensibilidad hacia los empresarios y los emprendedores, van a acoger algunas de las mayores inversiones de los últimos años en Navarra. Este es el camino a seguir: administración y empresa de la mano, pero no juntos. Cada uno debe de jugar su papel, y ambos deben de funcionar bajo el paraguas de la competitividad que impone el mercado...

Hemos dado pasos de la mano del Departamento de Educación del Gobierno de Navarra y de tres centros riberos de formación profesional. Nuestras propuestas han encontrado eco en la Administración foral, y hoy contamos con un proyecto enmarcado en nuestros “Premios a futuros profesionales”, que permite que los mejores estudiantes de FP puedan acercarse a las empresas que lo demanden, donde podrán analizar los procesos de producción para plantear mejoras e innovar sobre esos mismos procesos contribuyendo a mejorarlos.