El trastorno de incapacidad eréctil es hoy día un problema por demás normal, donde cada hombre sobre la tierra lo ha llegado a experimentar mínimo una vez en toda su vida. El sexo es una actividad necesaria para la vida del ser humano, siendo uno de sus propósitos existenciales. Por eso, el que este trastorno sea cada vez más común debería llamar la atención de todos, pues la actividad sexual podría llegarse a perder en un futuro y eso no sería bueno para nadie.
Como aviso introductorio a las causas comunes psicógenas de la disfunción eréctil, cabe destacar que aún no hay una explicación exacta que sustente por qué ocurre esto. Todavía hay algunos cabos sueltos y procesos químicos y mentales por estudiar y analizar. Esto debido a los múltiples casos donde se presentan excepciones únicas en el padecimiento según factores en común entre individuos pero con respuestas del organismo erecto diferente.
Es por eso que entre los eruditos del tema se presenta una duda, que de saber su respuesta, se explicarían muchas incógnitas: ¿Qué es más relevante? ¿El factor psicológico o el físico?
Factores psicógenos comunes: estres y ansiedad
Nuestro sistema nervioso tiene la trabajosa tarea de procesar y analizar todo estímulo que se efectúe fuera y dentro de nuestro organismo para responder ante él provocando las reacciones del cuerpo de una u otra manera.
Si una persona esta pasando por un momento en el que su vida está llena de estrés y ansiedad constante, llegando a ser incluso crónica por la acumulación de situaciones, circunstancias y emociones entonces se verá claramente reflejado en cada aspecto de su vida diaria; incluyendo, el sexo.
Entre las causas más comunes de la incapacidad eréctil en un individuo de género masculino se encuentra la ansiedad. Según estadísticas, quienes sufren de esta condición suelen tener entre 25 y 40 años e imposibilidad eréctil a temprana edad. Sin embargo, la ansiedad también es una causa de impotencia común en gente mayor.
En la actualidad, la ansiedad y el estrés son las enfermedades mentales máspadecidas por el hombre. Estas aparecen con las presiones diarias de la vida del ser humano como:
- Problemas económicos
- Presiones laborales
- Presiones por estatus social
- Responsabilidades y cargas en el ámbito familiar
- Tensión con su pareja
Entre otras tantas circunstancias que contribuyen al problema eréctil.
Con el pasar de los años, la disfunción eréctil por ansiedad se va volviendo más y más común, cada vez con menos restricción en cuestión de edades. La ansiedad es una causa que forma parte de la llamada disfunción eréctil psicógena, que es aquella que aparece por causas psicológicas.
La imposibilidad eréctil por ansiedad también se presenta en las personas que sufren o son propensas a la eyaculación precoz en el coito. Esto porque en medio del acto sexual el hombre busca la distracción para evitar eyacular precozmente, lo que hace que pierda el estímulo erótico y por ende la erección.
El trastorno de incapacidad eréctil se presenta también mediante pensamientos y emociones de insuficiencia. Al preocuparse por tener una reacción favorable en el acto sexual y en los temores presentes y pensar en la satisfacción de la pareja provoca que los niveles de ansiedad aumenten haciendo imposible que el individuo perciba las sensaciones anteriores a la eyaculación sino hasta que la excitación alcanza su punto final, eyaculando sin poder controlarlo.
Si se toman las cosas desde un punto de vista correcto y se lleva un estilo de vida sano, empleando actividades que ayuden a reducir este tipo de trastornos de ansiedad, depresión y estrés como lo es hacer ejercicios, entonces la incapacidad eréctil no durará mucho. Hay técnicas estudiadas que permiten mantener una erección por mucho más tiempo y en buen estado. A continuación algunos consejos que te ayudarán a cómo mantener la erección:
- Emplear masajes genitalesen tu vida diaria.
- Analizar las sensaciones que recibe el cuerpo antes y durante el coito.
- Evitar hábitos de mala alimentación como es el consumo de alimentos procesados.
- Es recomendado por los médicos especialistas el consumo constante y rutinario de bebidas infusionadas de hierbas que promuevan la circulación sanguínea en el organismo.
- Realizar todos los días ejercicios donde predomine el cardio.
- Buscar una manera sana de liberar la ansiedad, como con un deporte u oficio.
