Tras el pacto de París firmado por todos los países del mundo para intentar controlar el calentamiento, la comisión europea ha adoptado el pasado miércoles 28 de noviembre la nueva estrategia para que Europa se convierta en la primera gran economía del mundo climáticamente neutra de aquí a 2050.
Según el último Eurobarómetro especial (noviembre de 2018), el 93% de los europeos cree que el cambio climático está causado por la actividad humana y el 85% está de acuerdo en que la lucha contra el cambio climático y un uso más eficiente de la energía pueden crear crecimiento económico y puestos de trabajo en Europa.
Desde 1990 a 2017, la Unión Europea ha reducido sus emisiones un 22% y su economía ha crecido un 58%.
La nueva estrategia pretende que las emisiones de gases causantes del calentamiento deben reducirse a cero en el 2050.
Ese es el tiempo que tienen los países de la Unión Europea para dejar de utilizar los combustibles fósiles, es decir, el petróleo, el carbón y el gas, buscar alternativas sostenibles y dejar de ser dependientes energéticamente de países terceros.
Esto va a exigir un cambio de mentalidad y comportamiento por parte de la sociedad. Los entes europeos, nacionales y regionales deben potenciar e invertir mucho dinero para la investigación de nuevas formas de energía, digitalización del sistema de transporte y una mayor cooperación entre los entes locales y nacionales para un desarrollo ferroviario transfronterizo. Todo ello impulsado por la innovación y las inversiones.
Así se describen los siete ámbitos estratégicos: eficiencia energética; despliegue de energías renovables; movilidad limpia, segura y conectada; industria competitiva y economía circular; infraestructuras e interconexiones; bioeconomía y sumideros naturales de carbono; captura y almacenamiento de carbono para hacer frente a las emisiones restantes.
El reloj empieza a correr. Tenemos 31 años y 31 días.
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