La Dehesa de Ribaforada volvió a ser el punto de encuentro de vecinos y foráneos el pasado 1 de mayo. Coincidiendo con la celebración de la Fiesta del Trabajo y desde que en los años sesenta se recuperaran estas tierras, los ribaforaderos acuden a esta cita que, originalmente se celebraba el 3 de mayo, Día del Cristo, pero que, debido a que esa jornada era laboral y no había posibilidades de disfrutarla como festiva acabó trasladándose al primero de mayo.
Así, como manda la tradición, fueron muchas las cuadrillas que se desplazaron hasta esta zona -situada a tres kilómetros de la localidad- para disfrutar de un día de campo.
