Fernando Romay, mítico ex jugador de baloncesto del Real Madrid y la selección española, fue in invitado de lujo este pasado jueves en Castejón, a donde acudió después de pasar por Villafranca. Su presencia en Navarra estuvo enmarcda en una serie de actividades organizadas por la Federación Española de Baloncesto (FEB). Su día empezó en Pamplona y terminó en la Ribera, compartiendo un agradable rato de charla, consejos y anécdotas con los numerosos aficionados a este deporte.
Romay llegó al Polideportivo Municipal de Castejón acompañado del presidente de la Federación Navarra de Baloncesto, Pablo Bretos, y su vicepresidente, Antonio Ros. Fueron recibidos por la presidenta del Club de Baloncesto Castejón, Covadonga Fueyo, y el director técnico y deportivo del mismo, Juan Manuel Pérez Ligero, así como los jóvenes jugadores integrantes de los equipos: Junior femenino; Infantil femenino; Preminibasket Mixto y Benjamín 5x5 Mixto a pie de pista. Las gradas registraron un gran número de adultos ávidos por conocer a la mítica figura del baloncesto. Tampoco faltaron niños y niñas de localidades como Corella y Valtierra que se acercaron para estar cerca de la gran figura del basket nacional.
El ex jugador dirigió unas palabras a todos los apresentes, en especial a los padres de los jugadores, para darles las gracias por permitir que sus hijos jueguen al baloncesto al tiempo que les pidió que sean comprensivos con ello. A continuación se sometió a toda una serie de preguntas que le hicieron los jugadores más jóvenes, a las que Romay contestó, como buen gallego, con humor sarcástico, amabilidad y simpatía que le caracterizan. Por su parte, Covadonga Fuello le hizo entrega de un cuadro con los equipos de baloncesto del Club de Castejón, y una cesta de productos típicos de la localidad. A continuación se formó una larga fila de niños y niñas que reclamaron de Fernando Romay la firma de autógrafos, camisetas y balones que atendió con amabilidad.
Fernando Romay Pereiro nació en La Coruña el 23-9-69, con 2,13 metros de altura que lo convirtieron en el techo y el muro del baloncesto español. Con apenas 16 años llegó al Real Madrid en el que estuvo durante 17 temporadas logrando una gran colección de títulos tanto en España como en Europa. Todavía ostenta el récord de tapones en la historia de la ACB con 671.
