La metodología empleada por el técnico del Ribera Navarra, José Lucas Mena 'Pato', ha vuelto a ser objeto de visita. Esta vez, el que ha pasado unos días en Tudela para conocer los entresijos de las técnicas con las que el alicantino 'exprime' a sus jugadores ha sido Emanuel Santoro (Buenos Aires, 19/03/1986), entrenador del Club Atlético Banfield de la División de Honor del Futsal Argentino, la máxima categoría del país.
¿Qué tal la experiencia?
Excelente y muy enriquecedora. Me recibieron como si fuera mi casa y por eso, tanto en lo deportivo como en lo humano, ha sido espectacular. En Tudela trabajan muy bien desde la llegada de Pato, y haber compartido estos días con él y su grupo de trabajo ha sido muy enriquecedor.
¿Qué destaca de método de 'Pato'?
La mejor manera multiplicar el conocimiento es compartirlo. 'Pato' no se guarda nada y trabaja para el crecimiento de fútbol sala como deporte. Tanto que, sin conocerme personalmente, me abrió las puertas de su "laboratorio", compartió su modo de trabajo y me trató como un amigo. Eso es impagable. La premisa fundamental es el ataque, la posesión, el ser protagonistas y tomar las riendas del partido. Asimismo, sobre la manera de trabajar destaco que son ejercicios que llevan al jugador a pensar constantemente. Todo ello hace que el Aspil-Vidal sea uno de los clubes que con un juego más vistoso. Asimismo, desde el trabajo colectivo y el convencimiento del grupo logra pelear de tú a tú con las grandes potencias, por lo que es un ejemplo a seguir.
¿Cómo le surgió la oportunidad de venir a España y, en concreto, a Tudela?
Soy un entrenador joven que quiere seguir creciendo. En Argentina, si bien somos los campeones del mundo, aún estamos muy lejos de las grandes ligas europeas. Creo que la española es la mejor, y siempre hay que aprender de los mejores. Sin copiar, pero sí viendo las diferentes formas de trabajar para seguir forjando y perfeccionando un estilo propio.
¿Ha sido un viaje en el que también ha visitado otros clubes, no?
Visité al Barcelona, Inter Movistar y ElPozo Murcia, los "tres grandes" de la LNFS, y a las chicas de Alcorcón. Pero la visita al Ribera era una parada obligada porque me gusta mucho y me identifico con su manera de trabajar.
En Tudela ha pasado poco tiempo, ¿se ha quedado con ganas de volver?
Obviamente. Espero volver pronto para seguir creciendo como entrenador y también porque es una gran familia con la que han forjado buenos vínculos. Estoy muy agradecido a 'Pato' por abrirme las puertas y también a los jugadores y colaboradores por estar dispuestos desde el primer momento. Pero, sobre todo, tengo que hacer una mención especial a mi compatriota Lucas Tripodi, que ha sido un anfitrión de lujo. Pero ahora toca centrarme en el próximo torneo de la División de Honor, que empieza el 16 de marzo, un campeonato al que vuelvo con muchas ganas y la cabeza revolucionada tras esta experiencia. Allí, al otro lado del Atlántico, habrá un integrante más de la afición del Aspil, un admirador de su trabajo y un amigo.
