Castejón

Hasta el 22 para ver la exposición temporal 'El arte de nuestros viejos pastores

La Sala de Exposciones del Museo de Castejón acoge la exposición 'El arte de nuestros viejos pastores', en la que muestra diversos objetos y artilugios de los que se han servido durante muchísimo tiempo nuestros viejos pastores en su actividad diaria

EXPO. Y CONCIERTO 020
photo_camera Artilugios que se pueden encontrar en la exposición

La Sala de Exposciones del Museo de Castejón acoge hasta el próximo día 22 una exposición que, bajo el nombre 'El arte de nuestros viejos pastores', muestra al visitante diversos objetos y artilugios de los que se han servido durante muchísimo tiempo nuestros viejos pastores en su actividad diaria, hoy, prácticamente desaparecida. Los responsables de esta muestra del arte pastoril son el arqueólogo Jesús Gazola, y la coleccionista alemana afincada en Navarra, Gisela Wegener. En el acto de apertura estuvieron acompañados por la directora del Museo Mónica Campos, el alcalde de Castejón David Álvarez y en torno a 100 personas que siguieron con vivo interés las explicaciones de los responsables de la muestra que agradecieron a todos su presencia en el acto.

Jesús Gazola manifestó en su intervención que "no todos los pastores decoraban y adornaban sus objetos cotidianos tal y como se aprecia en la muestra. Por ello, estos objetos que ahora se exponen pueden considerarse como piezas únicas surgidas, en su mayoría, como objetos de regalo, sentimental en unos casos y sociales en otros".

La muestra 'El Arte de nuestros viejos pastores' trata de reivindicar la capacidad artística de estas personas mediante la recuperación de una amplia muestra de la mayor parte de sus enseres que recrea el imaginario de un universo desaparecido a mediados del siglo XX: el modo de vida pastoril.

La voluntad de embellecer los objetos de uso cotidiano es una característica del arte pastoril. así encontramos útiles de la vida diaria ejecutados de forma primorosa: cucharas, morteros ruecas, vasos, fiambreras, sellos del pan, cascapiñones, castañuelas, etc. Hasta tal punto que llegarán en ocasiones a convertirse en objetos de cumplido y compromiso social y regalos amorosos. Este arte de marcado carácter portátil tuvo su taller escuela en las dehesas extremeñas, ya que serán las milenarias rutas de trashumancia, que conectan norte y sur, las vías de circulación de estos objetos y de todo el bagaje que conllevan.