Cocinar de forma sostenible

Los españoles destinan a cocinar casi el 10% de la energía de sus hogares, según datos del Instituto de Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE).

Reduce y reutiliza el agua en la cocina, al igual que en el resto del hogar, se pueden instalar diversos dispositivos.

Consume productos locales, de temporada y ecológicos. Productores y consumidores están en un radio de acción de 100 kilómetros como máximo, de manera que se reduce la huella ecológica asociada al transporte, el uso de embalajes o el desperdicio de alimentos.

Evitan el desperdicio de alimentos. La Comisión del Parlamento Europeo calcula que unos 179 kilos de alimentos en buen estado se desperdician por persona al año. Hasta el 50% de los productos aptos para el consumo que se desechan se convierten en residuos a lo largo de la cadena alimentaria.