El sindicato UGT ha denunciado las condiciones en las que la empresa adjudicataria del transporte sanitario en Tudela y la Ribera está cumpliendo el servicio. “La situación de desamparo en la que se encuentra la Base de Tudela por parte de la Administración, pese a los continuos requerimientos de seguimiento de la contrata por parte de la UGT, es insostenible. Pasados tres meses y medio desde el inicio del servicio, las condiciones han ido empeorando y los incumplimientos del pliego de condiciones son muy graves”, afirman.
"La carencia de trámites o de una rampa reglamentaria focalizan las deficiencias, según el sindicato"
En noviembre de 2015, este servicio pasó a ser responsabilidad de la empresa Servicios Socio Sanitarios Generales. Según UGT, los vehículos que transportan a los enfermos no cumplen la legislación foral ni han pasado la Inspección Técnica Sanitaria, algo que se exige en el pliego.
Rampa “apañada”
El sindicato afirma también que estos vehículos “carecen de la rampa reglamentaria, “apañándose” con una como las de los remolques, que ya han dado más de un susto al caerse mientras bajaban a algún paciente”.
Otras deficiencias tienen que ver con el incumplimiento del tiempo de demora entre alarma y salida de los vehículos de urgencia o las condiciones de la nave dela Base de Permanencia y de la estancia en la que están los retenes y el personal de urgencia, que es “penosa”. “Creemos que la incapacidad para dar el servicio es evidente y que se debe rescindir el contrato y sacar una nueva licitación en la que se priorice la parte técnica sobre la económica”, añaden desde UGT.
