Las Jornadas de las Verduras cumplen XV años, ¿qué balance hace?
Yo creo que la gente puede apreciar que ha sido muy positivo. Prueba de ello es la consolidación a lo largo de estos quince años y el renombre y realce que se ha hecho de las verduras de la Ribera, de Tudela concretamente y sobre todo lo que está suponiendo todo eso en el ámbito local: potenciar comercio, potenciar la restauración. de manera que, incluso, cuando llegan estas jornadas dificilmente se pueden encontrar plazas hoteleras en Tudela. Eso quiere decir que la gente lo ha encajado bien, lo conoce, le gusta y, de alguna manera, lo aprovecha.
¿Qué aportan a Tudela?
Las jornadas aportan atracción de turismo, fundamentalmente, y potenciar la gastronomía de los establecimientos hosteleros de Tudela. Este año participan 40.
¿Por qué ya no se incluyen en el programa conferencias y jornadas más técnicas, que le daban un carácter más profesional?
Este año ha habido que reducir un poco las fechas que teníamos previstas con lo cual ha habido que condensar el programa, pero jornadas técnicas habrá, por lo menos, que yo recuerde dos: una en la UPNA y otra en la UNED. Tenemos la suerte de contar con dos universidades en Tudela y, además, con colaboraciones extraordinarias.
¿Qué futuro le augura a estas jornadas?
Intentaremos aguantar unos años más porque ya son 15 años, sin interrupción, pero contaremos con el apoyo de la integración en Navarra Gourmet, que es una institución del Gobierno de Navarra que pretende ser paraguas de todos los actos gastronómicos. El miedo que tiene mucha gente de que se lleven las jornadas de las verduras a Pamplona no es lícito. Lo único, que sí es correcto, me parece a mí, que estemos integrados bajo el mismo paraguas.
Algunos, en concreto el PSN, ha tachado las jornadas de “fiestas de charanga y pandereta”, ¿qué opina?
Pienso que hoy es más importante las jornadas técnicas, las degustaciones, los talleres de cocina, los concursos de pinchos, los concursos de menestras, las cenas que se organizan en las sociedades, la cena popular y todas estas cosas, además, centradas por primera vez en una carpa que estará situada en el paseo del Queiles yo creo que ofrecen un realce diferente a estas jornadas.
¿Qué es lo más duro?
Programar y coordinar todo porque empezamos a preparar las siguientes cuando terminan las anteriores. No nos descuidamos.
¿Qué le gustaría incluir?
De momento, como novedad este año, tenemos la carpa. Para el año que viene ya veremos a ver cómo resulta este año, veremos si nos conviene pensar en otro tipo de aventuras.
¿Van a presentar las jornadas en otras plazas?
Tenemos intención, pero bueno, en un principio y en base al acuerdo de colaboración que tenemos con el Ayuntamiento de Tudela pensamos que Zaragoza, por proximidad, era un sitio idóneo y adecuado para invitar a nuestros vecinos. Veremos hasta dónde podemos llegar, porque lo que no podemos, al menos en un principio, es pensar que vamos a hacer una presentación genérica, conjunta en una serie de casas de Navarra en el resto del país, sería una aventura. Hay que pensar en alternar y que igual el año que viene sean en Barcelona, que también tiene su tradición hortofrutícola. No nos podemos olvidar de Lérida, que igual es mejor lugar que Barcelona.
Personalmente, ¿qué verdura le gusta más? ¿Tiene algún truco para cocinarla?
Las alcachofas y, además, me gusta comerlas con agua porque deja un regusto especial. Los espárragos también, pero las alcachofas... A la hora de trocearlas, para que no se pongan negras, conviene tener un balde con agua que tenga un hilico cayendo y que se esté llendo permanentemente, de manera que no se oxiden.
