“Son más de 30 (de ellos, diez de Tudela) los grupos organizados que, de la práctica totalidad de las localidades de la Ribera, van a participar en la primera Javierada del 1 y 2 de marzo”, indica Ángel Echauri, delegado diocesano de las Javieradas.
Los fieles riberos, como manda la tradición, serán un año más los primeros en salir rumbo a la cuna del patrono de las misiones. La misa oficial de inicio de la peregrinación tendrá lugar en la iglesia de La Magdalena, de Tudela, a las seis y media de la mañana. Tras la eucaristía, que oficiará el propio Ángel Echauri, se procederá a la bendición de peregrinos, quienes partirán a las siete por el puente del Ebro hacia el Yugo, para descansar a los pies de la ermita y almorzar.
2.000 peregrinos
No obstante, la romería no comenzará el jueves, de la mano de los peregrinos de Ribaforada, que saldrán a las dos de la tarde, para pernoctar en la iglesia de Arguedas. Los peregrinos de Fitero también iniciarán la romería el jueves, y cuando lleguen a Los Abetos les estará esperando un autobús para llevarles de nuevo a Fitero. El mismo que les trasladará el viernes de nuevo hasta Los Abetos, para reemprender la marcha a pie camino de Caparroso, a través de las Bardenas.
Por su parte, los fieles de Cortes y Buñuel saldrán el viernes a las dos de la madrugada y atravesarán las Bardenas para dormir la primera noche en Figarol y la segunda en Sangüesa.
La diócesis ha acondicionado en Sangüesa varias iglesias y el frontón Cantolagua para acoger a cerca de 2.000 peregrinos. El lema de la Javierada de este año es “Testigos de Cristo, como Javier”.
