Las ansiadas vacaciones ya están a la vuelta de la esquina. Son momentos de desconexión, descanso y diversión. Aunque esto signifique cambiar por unos días nuestras costumbres diarias, no debemos descuidar en verano los buenos hábitos adquiridos durante el año.
Vacaciones en la playa
Los municipios costeros doblan e incluso triplican su población. Si vamos a la playa, no debemos dejar tirada la basura en la arena, los residuos podrían acabar en el mar perjudicando a todo tipo de vida marina.
Si en nuestro apartamento no hay cubos para distintos tipos de residuos, no es un problema. Colocando unas cuantas bolsas para seguir reciclando como lo hacemos en casa es la solución.
En el campo
España es el país de la Unión Europea que más se ve afectado por los incendios forestales, y la mayor parte de ellos son ocasionados por el ser humano. Hay que evitar fumar y no arrojar colillas, cerillas o cualquier otro material combustible susceptible de prender.
Además, el ruido provocado por el motor de los coches y los gases emitidos afectan negativamente a la fauna autóctona. Es preferible viajar en medios de transporte que no contaminen.
El verano también es una época en la que proliferan los festivales de música de todo tipo. Debemos cuidar nuestro tratamiento de los residuos y aprovechar estos eventos para seguir cuidando el entorno e inculcar en los demás la importancia de mantener los espacios limpios y libres de residuos.
En el caso de las reservas de la biosfera o parques naturales, cualquier interacción negativa en el hábitat de los animales y plantas autóctonas puede tener importantes consecuencias.
