Aunque este año el estudio estuvo enfocado a la innovación y las mejoras que el campus de la UPNA en Tudela podría llevar a las empresas de la zona, la primera parte del mismo se centró en el estudio de algunos indicadores económicos de la zona.
Por un lado, el informe apunta que el dinamismo demográfico registrado en la Ribera en el periodo 2002-2005 (1,1% anual acumulativo) se basó en la inmigración, al reducirse el número de residentes nacionales, representando el 11% de la población. Este porcentaje es el mayor de los registrados en Navarra. “Esto ha permitido que haya una mayor población potencialmente activa, lo que ha sido bueno para la renta per cápita de la Ribera. Este es uno de los factores que explica el porqué la renta de la Ribera se ha acercado a la media de Navarra”, explicó Sanz-Magallón. El autor del estudio también apuntó que, actualmente, esta tendencia está cambiando al reducirse el porcentaje de población extranjera en edad de trabajar, en favor de los niños.
En cuanto a la renta, el crecimiento experimentado en la Ribera entre 2001 y 2005 fue del 5,1%, dos décimas por encima del conjunto de Navarra.
El informe también refleja una mejoría en la rentabilidad de las empresas, después de la tendencia descendente registrada entre 1999 y 2004.
