Tudela

La pérdida de masa muscular en los mayores duplica el riesgo de discapacidad

La sarcopenia, pérdida progresiva de la masa muscular, suele comenzar a los 40 años en los dos sexos. A partir de ese momento, el proceso aumenta a un ritmo del uno por ciento anual, aproximadamente. La prevalencia de este problema entre la población mayor es muy alta; en las personas mayores de 65 años puede estar entre el 10 y el 20 por ciento, pero en personas de más de 80 años la prevalencia puede llegar a estar entre el 25 y  el 50 por ciento, siendo mayor en hombres que en mujeres.

La Prevención, el Ejercicio

Las consecuencias de este deterioro se traducen en la pérdida de fuerza en todo el cuerpo, especialmente en los miembros inferiores. Pero la acción de la sarcopenia no se limita a esto, sino que su existencia provoca un aumento significativo del riesgo de discapacidad, dependencia y mortalidad. En concreto, se ha constatado que la sarcopenia puede multiplicar por dos el riesgo de discapacidad, independientemente de otros factores personales o socioeconómicos del mayor. 

“La prevención comienza desde que nacemos”, ha afirmado rotundo el geriatra del Complejo Hospitalario Universitario de Albacete. “Hasta los 35 ó 40 años la masa muscular se mantiene, pero a partir de los cuarenta es muy importante desarrollar una actividad física regular, acorde a las características y circunstancias personales de quien la practica, y siempre pautada y controlada por un profesional”.

La práctica de una actividad física adecuada es una de las pocas pautas cuya implementación se recomienda al máximo en pacientes de más de 65 años.