Pamplona/Iruña

La lista de espera para intervenciones quirúrgicas en el SNS se reduce en 44 días desde septiembre de 2013

La lista de espera para intervenciones quirúrgicas en el Servicio Navarro de Salud se ha reducido en 44 días desde septiembre de 2013, situándose la demora media en 75 días hábiles, según datos extraídos a 31 de mayo de 2014. En dicho mes, el descenso fue de 3 días con respecto al mes de abril, manteniéndose así la tendencia de descenso iniciada en septiembre de 2013.

En cuanto a especialidades, en cirugía vascular la espera se reduce 1 día (de 50 a 49); en cirugía cardiaca, 4 días (de 16 a 12); y por lo que se refiere a las especialidades quirúrgicas más demandadas, la situación es la siguiente: en cirugía general, la demora aumenta en 1 día (de 61 a 62 días); en oftalmología, aumenta de 37 a 38 días; en Traumatología se reduce en 7 días (de 110 a 103 días); y en Traumatología infantil, en 10 días, de 37 a 27 días.

Se mantiene la demora media en consultas

En cuanto a la demora en consultas, la espera media se mantiene en 58 días, si bien el número de personas en lista de espera ha descendido en 370. Analizando en detalle por especialidades, hay que destacar que de 30 especialidades, 14 presentan descensos en la media, y 6 se mantienen: en Oncología, la espera se reduce en 1 día, situándose en 8 días de espera media. Cardiología reduce la espera en 3 días, situándose en 33, y en Cirugía torácica desciende 4 días (de 13 a 9). Cirugía general aumenta la espera en 3 días (de 68 a 71 días) y Ginecología mantiene la espera en 12 días. Neurocirugía reduce en 4 días, (de 17 a 13 días de espera), y Salud Mental en 4 días, situándose en 26 días hábiles.

Por lo que se refiere a situación en las especialidades más demandadas, independientemente de la prioridad clínica, Dermatología mantiene la espera en 38 días; Traumatología la reduce en 3 días, situándose en 122 días; y Oftalmología reduce la espera, en 2 días, situándose en 68 días.

Cabe recordar que el Servicio Navarro de Salud gestiona las listas de espera con mecanismos de priorización de pacientes, que establecen explícitamente una clara separación entre intervenciones preferentes y no preferentes. Con este tipo de gestión se trabaja para evitar demoras improcedentes en aquellos procesos de mayor importancia clínica, criterio esencial e irrenunciable en cualquier actuación sobre listas de espera.