Terminan las fiestas navideñas y no sabemos qué hacer con los dulces que sobraron. Ya no hay sitio en ninguna parte para esas vistosas bandejas que habíamos preparado un mes antes para agasajar a nuestros amigos y familia. Unamanera de evitar que todas esos caprichos navideños acaben en la basura o envejeciendo en alguno de los armarios de los dulces es convertirlos en postres. Aquí van alguna ideas.
Mousse de mazapán
Trituramos 150 g de mazapán, junto con 2 yemas de huevo y 100 ml de nata líquida especial para repostería. Mezclamos todo bien hasta obtener una fina crema. Aparte, montamos las claras de los huevos a punto de nieve y, con cuidado, las incorporamos. Mezclamos con suavidad, vertemos la mousse en copas individuales y las dejamos en el frigorífico durante un par de horas. Este postre lo servimos frío, acompañado por una salsa de frambuesas y unas hojitas de menta.
Flan de turrón
Trituramos 15 Desmenuzamos media tableta de turrón de chocolate o de turrón blando en un bol con 4 huevos, medio litro de leche desnatada y 2 cucharadas de azúcar. Con la batidora, lo trituramos todo hasta formar una mezcla ligeramente cremosa. A continuación, untamos el interior de cada flanera con caramelo líquido, vertemos la crema, tapamos las flaneras con papel del aluminio y las horneamos al baño maría durante 30 minutos a 180º C.
Verificamos que el flan está en su punto -si metemos una aguja, esta debe salir limpia-, sacamos las flaneras del horno y las dejamos enfriar. Una vez frías, las guardamos en el frigorífico y desmoldamos al día siguiente.
Bizcocho de polvorones
En un bol, deshacemos 200 g de polvorones, agregamos medio sobre de levadura en polvo y lo mezclamos bien todo con 2 cucharadas de azúcar glass (si somos golosos, después podremos añadir un poco más de azúcar...). Removemos con una espátula y añadimos 40 g de mantequilla derretida y 2 huevos. Además, para aromatizar, añadimos ralladura de naranja y de limón.
Untamos con mantequilla derretida el molde de plumcake o de bizcocho y luego, para que no se pegue el bizcocho y se pueda desmoldar con facilidad, con un poco de harina. Vertemos la masa en el molde y la repartimos de manera homogénea. Precalentamos el horno a 225º C y horneamos durante 10 minutos, hasta que se forme una costra en la superficie.
A continuación, sacamos el bizcocho y, con la ayuda de un cuchillo, hacemos una incisión en la costra. Bajamos la temperatura a 180º C y horneamos durante 50 minutos más. Al cabo de ese tiempo, pinchamos con un palillo en la parte central para verificar que el bizcocho está cocinado. Cuando el palillo salga seco, desmoldamos y, sobre una rejilla, dejamos que se enfríe al menos 1 hora.
Galletas de turrón
Con el robot de cocina, trituramos media tableta de turrón duro, 30 g de mantequilla a temperatura ambiente, 2 huevos, 3 cucharadas de azúcar glass y 100 g de harina. Mezclamos todo en un gran bol y amasamos hasta que consigamos una masa homogénea. La dejamos reposar durante 2 horas antes de volver a manipularla. Estiramos la masa en una superficie fría y enharinada, cortamos con la forma de las galletas y horneamos 10 minutos a 180º C.
