Un año después de sus primeras fiestas de San Miguel como alcalde de Corella, Gorka García asegura, paradójicamente, que las afronta “algo más nervioso” que en la anterior edición. No obstante, esa tensión previa al cohete del día 23 se mitiga con su innata pasión por estos días en la localidad del Alhama. Así es el repaso a las fiestas y a la actualidad del primer edil corellano.
Ha pasado algo más de un año desde que es alcalde de Corella. ¿Cuál es su balance?
Muy positivo. Ha sido un año de trabajo duro, porque hemos tenido que abordar varios temas, pero el balance en general es positivo, aunque todavía tenemos muchos puntos de trabajo pendientes.
¿Cambia mucho la perspectiva de estar en la oposición a coger la responsabilidad desde alcaldía?
Completamente. En la oposición la tarea principal es fiscalizar. Pero cuando estás al frente del consistorio la responsabilidad es mayor. Hay que ser mucho más exigente ara conseguir los objetivos que te marcas.
Corella tiene un peso en la Comarca, aunque lo ha ido perdiendo por causa de la enorme crisis económica. ¿Qué medidas están tomando a nivel municipal para tratar de reemprender el rumbo?
En términos de empleo, además de las pequeñas cosas de cada día, como pueden ser los cursos y formaciones enfocados al empleo, desde el Ayuntamiento tenemos una apuesta muy fuerte por el Polígono Industrial de los Cuatro Caminos. Creemos que por su situación estratégica es fundamental para Corella y estamos en reuniones con el promotor y con Gobierno de Navarra para lanzarlo. Conseguir implantar ahí ese polígono va a ser muy importante, más si cabe porque cuando llegamos al Ayuntamiento nos encontramos con que no había ni un solo metro de suelo industrial para albergar a empresas.
Al igual que en otros municipios, ACI tuvo que llegar a un acuerdo, en este caso con el PSN. ¿Cómo es esa convivencia?
Con el Partido Socialista tenemos un acuerdo programático que es claro. Evidentemente somos siete concejales y cada uno tiene una forma de ver las cosas. Ha pasado un año y hemos tenido encuentros de todo tipo, positivos y menos positivos. Pero creo que estamos trabajando muy bien y en estos momentos hemos confeccionado un equipo de gobierno que se ha olvidado de las siglas, pese a que a veces tengamos diferentes puntos de vista o en algunas mociones hayamos ido en direcciones contrarias.
Donde sí hay un asociacionismo muy positivo es el en propio municipio, con sus colectivos y asociaciones.
Podríamos hablar de muchos, de Tambarria, de las peñas, del grupo de Teatro, de Biciclistas o de la Asociación San Miguel, que ha dado una vuelta al concepto que teníamos de los jóvenes. No sé si ha sido propiciado por el cambio de gobierno, pero desde que llegué, he visto muchas ganas de hacer cosas y creo que se han aprovechado muy bien de nuestra voluntad de ayudar y de apoyar. En ese sentido estoy encantado.
Centrándonos en fiestas, ¿le gustan mucho o poco? ¿Cómo las afronta este año?
Ya antes de ser alcalde me gustaban mucho y eso no ha cambiado. Las afronto con más nervios que el año pasado, cuando todo te iba viniendo sobre la marcha. Pero aun así, las disfruto mucho, especialmente los momentos del vermú, de los vinos por la tarde. Estar con los amigos, la familia, en el ambiente de la calle Mayor... me encantan las fiestas de día.
¿Cuál diría que es la seña de identidad de las fiestas de Corella?
Creo que el disfrute en la calle es una seña de identidad de los corellanos en fiestas. Somos gente que participa mucho de todas las actividades. Eso y que tiene un componente que aúna tradición, en actos como las comidas, las corridas o los actos religiosos, con la frescura que le ponen algunas cuadrillas y peñas. Además, este año el programa tiene muchas novedades, ganaderías diferentes todos los días... tengo que hacer una mención también al concejal de Festejos, Javier Arellano, que se recorre la comarca en busca de las orquestas que mejor encajan en Corella, lo que le da a ese aspecto más valor.
