Desde el pasado mes de noviembre, el centro de salud Tudela Oeste (Gayarre) de Tudela está inmerso en un programa piloto para la reforma de la organización asistencial en atención primaria. Se trata de una iniciativa en la que también participan otros cuatro ambulatorios navarros -Tafalla, Villava, Ansoain y Ermitagaña- y que busca optimizar los recursos de los centros a través de cambios organizativos.
Cambios organizativos
Para ello y durante un periodo inicial de seis meses, en cada uno de ellos se pondrán en marcha las medidas necesarias para hacer frente a sus respectivas necesidades reales. Posteriormente, se aplicarán las más efectivas al resto de centros navarros. “En nuestro caso, el sistema organizativo que tenemos genera unos problemas que ocasiona descontento entre los usuarios porque hay dificultades de acceso al centro, y al mismo tiempo entre los profesionales porque tenemos la sensación de que no podemos abarcar todo el trabajo que tenemos”, explicó Lola Artajo, directora del centro Tudela Oeste. Además, la responsable añade que estos problemas no encontraban solución al ampliar los recursos humanos del ambulatorio (actualmente cuenta con 5 administrativos, 5 médicos de mañana de medicina general, 1 médico y medio por la tarde, 2 pediatras y 7 enfermeras). Ante esta situación y tras conocer el programa, fue el propio centro el que se ofreció para formar parte de él.
Entre los cambios que ha puesto en marcha el centro de salud para mejorar su funcionamiento se encuentra el evitar que todas las personas que acudan a él pasen al médico. “Pensamos que no es necesario. Hay temas que se pueden diversificar más y que pueden atender las enfermeras, como serían temas de cuidados y otros aspectos como la anticoagulación”, comentó Artajo. Otra de las medidas pasa por potenciar el área de administración. “Serían consultas administrativas para recoger volantes para clínicas, informes... agilizando así la solución de los temas de los propios pacintes”, comentó.
La mejora del servicio telefónico también está prevista en el programa. Así, para evitar el colapso de las líneas a primera hora de la mañana, el Gayarre cuenta con un mensaje automático que distingue entre urgencias, citas para el mismo día y para otros (en este caso se deja el nombre y el teléfono, y el propio centro se pone en contacto con el paciente). Además, está prevista la instalación de líneas directas con los médicos evitando su paso por centralita. “Si das más accesibilidad, se fomenta el autocuidado para el que a veces no es necesaria una consulta médica, agilizando así el sistema”, dijo Artajo quien calificó el proyecto de interesante. “Se van a sacar cosas muy válidas, pero está costando un esfuerzo”, manifestó.
