Cortes

El Cortes planta cara pero sucumbe ante el Celta B (0-2)

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Cortes respondió a las expectativas y se vistió de gala para presenciar el primer partido de la historia de su equipo en una Fase de Ascenso a Segunda B. El remozado San Francisco Javier, repleto por los más de 1.000 espectadores que acudieron, no pudo sin embargo saborear una victoria de los suyos. El Celta B hizo honor a su condición de favorito para llevarse el triunfo y una renta cómoda de cara a la vuelta en Vigo (0-2).

Y eso que los pupilos de Rubén López les pusieron las cosas muy difíciles a los gallegos. El partido se desarrolló bajo el manto del juego físico y en largo que propusieron los locales, y al que costó adaptarse al conjunto celtiña. El Cortes siempre buscó la espalda de la defensa y la velocidad de su hombre-gol, David González 'Becerrica', que se exprimió, peleó e hizo sudar de lo lindo a la zaga rival. Suya fue una de las dos ocasiones locales más claras, en el minuto 7. Su chut, al igual que el de Jorge Viela tres minutos antes, se fue a las nubes.

Tardó el Celta B 15 minutos en presentar credenciales y trenzar su primera jugada de peligro, que acabó también con el balón muy desviado. El choque pudo cambiar de haber pitado el colegiado un claro penalti por mano en el área a favor de los riberos. Era el minuto 20. A la media hora, Imanol tuvo el tanto cortesino más cerca que nunca. Se elevó para rematar un córner por encima de todos, pero su testarazo no encontró la puerta gallega.

FICHA TÉCNICA

En la segunda mitad empezó a llover, y bajo el agua el Celta B se encontró a sí mismo. El técnico local movió el banquillo viendo que el choque entraba en su fase decisiva. Pero a falta de 14 minutos, Benja batió a Ricardo e hizo el 0-1 tras una gran jugada personal. Pese a qe los celtiñas se quedaron con uno menos a diez del final, los locales no lograron claridad en tres cuartos de campo, y en una contra Benja, de nuevo, aumentaría la renta. Los últimos siete minutos fueron de entrega por parte del Cortes, que terminó ovacionado por su fiel y guerrera afición pese al resultado. Se lo merecían.