Dornier, empresa adjudicataria de la gestión de la zona azul, ha sido denunciada ante la Inspección de Trabajo por sustituir a los trabajadores que mantienen una huelga indefinida desde el pasado 2 de noviembre para conseguir que se les aplique el convenio que mantenían con la anterior empresa (Gertek).
Según explicó Eva Martínez, delegada de la Federación de Servicios del sindicato ELA, “el 5 de noviembre Dornier contrató a una empresa de limpiezas para poner en funcionamiento las máquinas controladoras”. El mantenimiento de las mismas es una de las funciones de los empleados que actualmente secundan la huelga por lo que entienden que esta sustitución “es un hecho muy grave y totalmente antidemocrático”. “Lo más vergonzoso es que este servicio de limpieza iba escoltado por la Policía Municipal”, añadía Martínez, quien apuntó que el Ayuntamiento, con la concejala Maribel Echave al frente, “ha tomado partido en el conflicto y ha usado recursos públicos para defender los intereses de Dornier”. Y es que, que los usuarios de la Zona Azul no tengan que pagar por estacionar “supone un perjuicio económico para ambos”, puntualizaba.
A pesar de que los seis trabajadores van a seguir reivindicando sus derechos reconocen que “no es grato para nadie estar tanto tiempo en huelga y sin que la empresa se ponga en contacto con nosotros”, indicaba José Ignacio Calavia, uno de los afectados.
