Caparroso se pone de punta en blanco para celebrar sus fiestas

Sobre las 11:30 se podía palpar los nervios de los casi 20 miembros que forman la Asociación de Belenes y la Cabalgata de Reyes de Caparroso. Entre todos ellos, María Luisa Luqui, la encargada en hablar a todo el pueblo, recorría con su escrito el amplio balcón del Ayuntamiento. Todos estaban contentos, ilusionados, pero también echaban en falta a Piedad Marín, que a sus más de 90 años no ha podido presenciar el cohete en directo. "Se lo dedicamos a ella", comentaba Luqui. "Nos ha enseñado todo lo que sabemos y es el alma del belén", coincidían todos. Con el paso de los minutos la nueva plaza de toros empezaba a llenarse, hasta que a las 12 ha llegado el turno de María Luisa Luqui. Tras agradecer al Ayuntamiento el honor de tirar el cohete, y después de animar a los caparrosinos ha colaborar con la asociación, ha entonado los tradicionales vivas a Santa Fe, Caparroso y Navarra.

Tras el estallido del cohete, la fiesta se ha trasladado a las calles de Caparroso, donde jóvenes y mayores han disfrutado de un entretenido pasacalles en el que se han visto auténticos bailes de los mejores charangueros. Los movimientos de piernas y caderas, siempre acompañados de algún amigo, animaban un pueblo que vivirá sus 8 días más importantes del año. La ronda se ha dirigido hasta la residencia de ancianos, donde Pilar Monente, a sus 85 años, ha lanzado otro cohete para alegría de todos sus vecinos.