Pamplona/Iruña

Barkos llama a la colaboración entre todos ante los retos que debe afrontar Navarra

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La Presidenta de Navarra, Uxue Barkos, ha hecho un llamamiento a la colaboración de las fuerzas políticas para abordar los retos que debe afrontar Navarra, entre los que ha citado superar los efectos de la crisis que padecen muchas familias, la negociación del Convenio Económico o lograr una convivencia que aún se encuentra lastrada por el recuerdo de la violencia, un llamamiento que ha extendido a la ciudadanía para alcanzar una sociedad "más cohesionada, justa y solidaria". En el discurso que ha pronunciado este sábado 3 de diciembre en el acto institucional conmemorativo del Día de Navarra 2016, la Presidenta Barkos ha pedido "un esfuerzo para romper esas barreras que a veces nos alejan a unos de otros", indicó.

La Presidenta afirmó, al comenzar su intervención, que el Día de Navarra es una fecha "para mirar al horizonte, al futuro, con ilusión y con optimismo. Vivimos momentos de cambio y la sociedad navarra ha dado muestras sobradas de responsabilidad y de madurez". "Navarra vuelve a estar en marcha –añadió- y avanza con paso firme convencida de que lo que tenemos por delante es mucho mejor que lo que estamos dejando atrás", aunque recordó que las consecuencias de la crisis económica siguen afectando a muchas familias navarras, y que ellas, "más que nadie, son quienes deben guiar nuestras preocupaciones más inmediatas", destacó.

No es el único reto que debe afrontar el Gobierno de Navarra para construir una sociedad que tiene todavía "carencias importantes en la convivencia y en la aceptación de nuestra pluralidad", según Barkos, quien añadió que "hoy estamos mejor situados en el camino para superarlas", algo que sólo se podrá conseguir "con el concurso de todas y de todos, con el trabajo convencido en colaboración, desde la distancia, desde la diferencia; desde ópticas diferentes que serán el mejor modo de conocer nuestra realidad y el horizonte hacia el que queremos viajar", manifestó.

La Presidenta destacó, entre los retos pendientes, la defensa del Convenio Económico, "un objetivo que el Gobierno que presido puede encarar desde la seguridad que da la unidad parlamentaria" porque fuerzas políticas "casi siempre distantes" han sido capaces de buscar una posición común en defensa de los intereses de Navarra, "un ejemplo que quiero agradecer públicamente a todos los grupos parlamentarios, y en especial a quienes hoy ejercen la oposición. Pues soy consciente de que no es fácil cerrar filas con un Gobierno al que se aspira a suceder. En esta ocasión, sin embargo, ha primado el interés general al partidista. Un hecho que confío en que podamos ampliar a otras áreas tan o más importantes", apostilló.

Tras asegurar que el Gobierno va a actuar con "rigor y firmeza" en la defensa de los intereses de Navarra a la hora de negociar el Convenio "sin renunciar a la solidaridad con el resto de la ciudadanía del Estado", la Presidenta Barkos apeló de nuevo al resto de fuerzas políticas para "aspirar a ser vanguardia europea".

También ha hecho un llamamiento a la unidad para mejorar la convivencia "en una sociedad que todavía vive diferencias económicas que debemos paliar y atender. Una convivencia que asienta sus pilares en la solidaridad y en la cohesión social. Hemos atravesado unos años de una crisis económica profunda y difícil, que ha sido cruel con los más débiles y que ha dejado unas graves heridas que sólo entre todos podemos ser capaces de restañar".

La Presidenta abogó por una Navarra "que avance sin dejar a nadie atrás para lograr una sociedad más cohesionada, justa y solidaria", defendió. "Es por ello por lo que la inversión social es hoy la principal infraestructura de la que nos podemos dotar. Es un esfuerzo que debemos hacer como sociedad porque sólo evitando la fractura social podremos sentar las bases de la Navarra próspera y solidaria que queremos para el futuro", indicó.

En el terreno de la convivencia, Uxue Barkos se refirió a las víctimas y los daños causados por el terrorismo de ETA y a las "violencias asociadas que han generado víctimas tan dolorosas como las anteriores. Ninguna víctima es igual a otra, pero todas merecen igualmente nuestra atención, nuestro respeto, nuestro recuerdo", manifestó. En una nueva apelación al esfuerzo conjunto, afirmó que "todos debemos esforzarnos por entender la diversidad que ha formado y debe seguir conformando esta tierra", dijo. Por ello, señaló que el día de San Francisco Javier "es un buen momento para darnos cuenta de que no hay una sola Navarra posible. Son muchas las navarras que hoy constituyen nuestra rica realidad sociológica. Con sus particularidades, sus símbolos y sus emociones. Tan dispares en ocasiones, pero que nunca deben ser contradictorias", defendió.

La Presidenta dijo que el hecho de tener dos lenguas debe ser "motivo de orgullo y no elemento de división y confrontación. Sin privilegios, pero también sin discriminaciones. Y lo quiero subrayar hoy, en el también Día del Euskera. Reconocer esa pluralidad es también un principio básico sobre el que construir esa sociedad del futuro. Porque nadie debe cambiar, pero todos debemos hacer un esfuerzo por romper esas barreras que a veces nos alejan a unos de otros", destacó.

La aspiración a la convivencia y la solidaridad entre los navarros, eje vertebrador del discurso de la Presidenta, también estuvo presente en su conclusión: "Cuanto antes nos encontremos en ese lugar común, más sólida será la base sobre la que seguir avanzando en la construcción de una Navarra más justa, solidaria y feliz. Porque juntos, desde una visión compartida de esa Navarra plural, créanme, somos mucho mejores: la mejor competición, la colaboración", finalizó.