El Casco Viejo de Tudela ha vuelto a sacar a la luz vestigios del que fuera el pasado de la capital ribera. En esta ocasión han sido las obras de ampliación y renovación de redes que se están llevando a cabo en la plaza de San Juan las que han dejado al descubierto restos de la antigua iglesia que había en la zona y que llevaba el mismo nombre que la plaza. Un hallazgo esperado que será analizado mañana jueves por técnicos de la institución Príncipe de Viana. “Lo que está apareciendo hasta ahora es bastante normal, algo que se esperaba, como son los restos de la antigua iglesia de San Juan y de un trujal, elemento que en aquella zona y en aquella época tenían muchas casas”, comentó Mariví Castillo, edil de Urbanismo. Así, si no aparece algún hallazgo de mayor entidad, los restos serán catalogadas y enviados a Príncipe de Viana, por lo que las obras -cuya finalización está prevista para el mes de abril- no se verían afectadas.
