En el último pleno celebrado en el Ayuntamiento de Tudela, el tema volvió a relucir con luz propia en el turno de ruegos y preguntas por parte del público. No obstante, los orígenes de las reivindicaciones se remontan a 2012. Fue entonces cuando la APYMA del CP Griseras comenzó a trasladar al equipo de gobierno y los concejales del resto de grupos la necesidad de cambiar el funcionamiento del semáforo situado a la altura del número 56 de la Avenida Zaragoza, en pleno camino al colegio para muchos padres y niños.
Los inconvenientes son principalmente dos: el semáforo no funciona con el sistema habitual de luces de forma continuada y el paso del verde al rojo no tiene transición con parpadeo. Esto hace que, por una parte, los conductores, acostumbrados a que el semáforo no esté activo durante todo el día, no se fije del todo en su indicaciones. Esto ocurre también en horario de entrada y salida al colegio, incrementando el peligro de accidente. Por otro lado, los peatones no tienen referencia de cuándo va a cambiar el color y se encuentran con la incertidumbre en pleno cruce.
Los Caminos Escolares
Eduardo Esteban e Iker Clemos son padres de alumnos del centro y miembros de la APYMA, y cuentan que han tenido “más de un susto” en el citado paso de cebra. “Si preguntas a todos los padres, más de la mitad te podrían poner ejemplos de sustos que han tenido”, señala Iker Clemos. “Los coches vienen a toda velocidad, no se fijan en el semáforo porque creen que no funciona cuando realmente sí lo hace. Es tan fácil como que el funcionamiento sea continuado, porque así no daría lugar a dudas”, añade.
Por su parte, Eduardo Esteban señala la “contradicción” que supone haber presentado el proyecto de los Caminos Escolares y no haber acometido esa mejora. “La seguridad que nos venden, al menos en ese tramo, no es real, porque es un punto claro de peligro”, dice Esteban, quien añade que “el objetivo del proyecto de Caminos Escolares de dar autonomía a los niños y tranquilidad no se cumple ahí. “Es más caro colocar un paso de cebra peraltado que ajustar el semáforo a las necesidades reales. Estoy convencido”, dice. “Al menos, que pongan un temporizador para que haya transición entre el verde y el rojo”, añade Clemos.
El Ayuntamiento, a través de su concejal de Urbanismo Joaquim Torrents, señala que “ya se ha empezado a trabajar” en este asunto. “Conocemos las circunstancias y Policía Municipal ya se ha puesto manos a la obra. Está elaborando un informe exhaustivo que estudiaremos en la comisión de Urbanismo muy pronto”, afirma.
Plaza de aparcamiento
Por si fuera poco, desde hace alrededor de un mes se habilitó una nueva plaza de aparcamiento justo en la esquina que viene de la rotonda que une Baquero Jacoste con la Avenida de Zaragoza. Una plaza que, como explican ambos padres, “resta aún mayor visibilidad a los vehículos que se aproximan al paso de cebra”. Joaquim Torrents asegura que “ya se ha dado orden a Policía Municipal de que suprima esa plaza de aparcamiento y se han podado los setos que restaban visibilidad”.
