“Tenemos que hablar de todo con todo el mundo”. Es la frase de Eneko Larrarte que resume en gran parte la acción de gobierno de los nuevos inquilinos de los mandos del Ayuntamiento de Tudela. Las reuniones con colectivos, instituciones, políticas, órganos socioeconómicos, entidades culturales y deportivas o empresas, entre otros agentes, han sido la tónica del tripartito que forman Izquierda-Ezkerra, PSN-PSOE y Tudela Puede.
El propio alcalde explicaba que esta disposición al diálogo se debe a su apuesta por la gestión “desde la participación”. “No hemos podido poner la impronta política en otras cosas como nos habría gustado”, señaló sin embargo Larrarte, quien también pidió disculpas por “los errores que han cometido, tanto de cara a la población como de cara a la oposición en el Ayuntamiento”.
Hitos
En cuanto a los hitos llevados a cabo hasta la fecha, el concejal José Ángel Andrés (PSN), responsable del área de Asuntos Económicos y Hacienda, señaló el ahorro mediante la reducción de las asignaciones de los concejales (unos 72.000 euros al año según los cálculos del equipo de Gobierno) o la congelación de la “práctica totalidad de las tasas”, algo que se ratificará en el ejercicio de 2016. A este respecto, cabe destacar también la modificación de la ordenanza mediante la cuál se regulaba el uso de espacios y centros cívicos, para el que, a partir de ahora, los colectivos culturales no pagarán. “Nos parece de justicia social”, señaló Andrés, quien manifestó que “no pueden pagar lo mismo quien más tiene que quien menos tiene”.
En cuanto al área de Urbanismo, su responsable, Daniel López, se felicitó por haber puesto en marcha un sistema de avisos para el mantenimiento urbano y los primeros pasos de un índice de inmuebles y solares municipales, “mecanismos que no existían anteriormente”.
