El pasado curso, la euforia de los aficionados del Tudelano tocó techo. Ver cómo un club que ha sufrido tanto para alcanzar la categoría de bronce se codea con los mejores e incluso se asoma tímidamente a la 2ª División sube la moral hasta al más ‘amuermado’. Por eso, digerir de nuevo la cruda pero latente realidad de esta categoría tiene como precio unas digestiones pesadas, dolorosas y machaconas. Como la de este domingo. En su estreno como local esta temporada, el Tudelano ha perdido ante el Somozas (0-1). Una derrota que los gallegos no merecieron ni de lejos pero para la que los locales tampoco opositaron con la energía y el vigor de la ‘era Mandiola’.
El cuadro de Sergio Amatriain va a querer el balón. Mandar y proponer. Una apuesta que a veces resulta menos rentable de lo esperado, pero que gusta a los técnicos como el ex jugador de la Peña Sport. Así, el Tudelano comenzó ajustando el ritmo de la contienda y llevando la iniciativa. De los gallegos, ni rastro. Solamente un desempeño defensivo cuya mayor virtud era el sacrificio y la solidaridad. “Nos están apretando, para el partido, hombre”. Eso le dijo el portero visitante Mandaluniz a su lateral derecho al cuarto de hora. Fue como si todos le oyeran y se pusieran manos a la obra.
Del primer periodo solo destacaron las internadas por la izquierda, banda en la que Gayoso y Ion Vélez se entendieron bien., aunque sin demasiada precisión a partir de la línea de tre cuartos. Por el carril zurdo metió Ibai un centro chut que salió desviado y, poco después, Javi Cabezas –el más luchador de todo el equipo- otro pase de la muerte que le vino demasiado encima a Pau Franch. Eran intentos con cierto peligro, pero bastante estériles. Se precisaba más garra.
La segunda mitad no tuvo una tónica demasiado diferente, aunque el carril derecho del Tudelano tomó otro protagonismo de la mano de Delgado. Antes de que el lateral fuera sustituido por Aser Albes, Amatriain había metido a Iñigo Ros y Óscar Vega para dar más movilidad en punta y animar a la segunda línea a que llegara. El muro gallego frustró cualquier intento local de acabar una jugada. Los jugadores parecían contagiarse entre ellos de una resignación con tintes de infección vírica. La apatía se iba extendiendo con el paso de los minutos y el rival, hasta entonces igual de inocuo y agazapado, aprovechó una de sus pocas ocasiones para dejar mudo al Ciudad de Tudela.
Fue en una contra bien llevada por la banda derecha. Iván Pérez, que había entrado apenas diez minutos antes, recibió en el pico izquierdo del área de Pagola, se acomodó el balón y cruzó su disparo para batir al pamplonés a apenas cinco para el 90. Una puñalada profunda y alevosa para los blanquillos que, no es que se quedaran sin capacidad de reacción en este momento, sino que ni siquiera mostraban trazas de revertir una situación típica de estos partidos. Al final, los puntos volaron de Tudela tras un guión de 2ª B. Ni más ni menos. Toca armarse de paciencia, porque el margen de mejora es enorme.
Ficha técnica:
TUDELANO: Pagola; Delgado (Albes, m.82), Nandi, Corral, Gayoso; Lázaro; Javi Cabezas (Iñigo Ros, m.67), Ibai, Chema Mato, Ion Vélez; y Pau Franch (Óscar Vega, m.67).
SOMOZAS: Mandaluniz; Núñez (Pereira, m.88), Pablo, Antonio, Artabe; Fran No, Baleato; Amaro (Quevedo, m.84), Rami, Arkaitz; y Rodríguez (Iván Pérez, m.75).
ÁRBITRO: Subirats Matamoros (Comité Catalán), asistido por Villaseñor y Luceño. Amonestó por el Tudelano a Javi Cabezas y por el Somozas a Rami y Fran No.
GOL: 0-1. m.86: Iván Pérez.
INCIDENCIAS: Entrada muy floja. Unos 500 espectadores en el Ciudad de Tudela.
